Buenas, ahora que ha terminado este fin de semana, que ha sido de locos, y tengo un ratito antes de volverme a poner a currar os voy a contar mi última captura, que me ha quitado una espina que tenÃa clavada.
Bueno, llega mayo, y con él, como ya es de costumbre, una cita a la que no se puede faltar en Mallorca. El trofeo Pep Amengual, donde son fijos pescadores como Pedro Carbonell, José Luis Fernández, Javi López (campeones de baleares por equipos 2016) y muchos maquinas más…
El viernes decidimos ir con Mallorki a pegar unos tiros por la bahÃa de Palma, y aproveché para probar el nuevo montaje que le he hecho al fusil Picasso Magnum Rail, ya que lo tiene que heredar un compañero, y querÃa asegurarme de que va bien.
Al final, la jornada termino con un mero blanco por mi parte, y un dentón de mallorki y un buen ranchito de corvas que pillamos entre los dos, asà que estaba motivado para el campeonato, y ya que el fusil se comportó de maravilla, decido llevarlo de titular en el campeonato y jubilarlo allÃ.
Llega el sábado, el dÃa del campeonato, y al estar un compañero y yo sin barquero, y ser el campeonato en zona de acantilado decidimos ir juntos y hacer relieves.
Como ya es de costumbre llegamos un poco tarde jajaja, asà que tiramos la barca, nos vestimos rápido y nos fuimos a la zona de salida, de camino, pasamos justo al lado de dónde me dio el sincope, no habÃa vuelto desde aquel dÃa a esa zona. Mi amigo me mira con cara de: no hace falta decir nada… y seguimos navegando sin más. Llegamos a la zona de salida y en menos de dos minutos se dio la salida, y al tener que nadar solos, sin barca, decidimos ir lo más lejos posible para poder pescar un rato solos, asà que llegamos al final de la zona, y deje a mi compañero, y quinientos metros después me tire yo, después de haber fondeado la barca.
Una vez en el agua vi que la visibilidad era muy buena, habÃa bastantes medusas, y estaba muy nublado. Después de algunas bajadas a poco más de 10 metros y ver que los senos me daban por culo y no compensaba bien (esta sinusitis me está matando) decido ir pegado a la orilla mirando los huecos y haciendo esperitas para ver si pillo alguna lisa o algún sargo, pero no hay mucha suerte, solo consigo pillar un sargo. Asà que sigo nadando. Después de una hora y media pescando en una de esas bajadas para mirar un agujero, esta vez, un poco despegado de la orilla, me encuentro en un fondo de 6 metros y poco y al levantar la vista veo a un dentón de esos kileros que me espÃa a lo lejos, asà que me quedo inmóvil esperándolo, pero me entra muy al lÃmite y decido no disparar.
Subo, y al tiempo que ventilo, me quito la boya para hacer otra espera un poquito más lejos. Veo un rinconcito donde puedo esconderme, asà que me dirijo hacia él, mirando a los alrededores, y muuuuuy lejos, veo un destello. Madre mÃa, ese hace más de un kilo… jajajaa, lo veo nadando tranquilo, pero muy atenuado, estaba muy lejos, no me habÃa visto. Al verlo pensé, a este lo pillo.
Cojo una bocanada de aire, y bajo, me escondo detrás de la roca, solo dejo a la vista el fusil y mis ojos, y ya solo queda deleitarme con lo que está por venir. Con el silencio que se oye en las esperas, esa paz, desde muy lejos, veo como el dentón se gira, y empieza a nadar hacia mà muy lentamente, como si estuviera desfilando, mantengo la calma, y me escondo un poco más, lo veo entre las algas nadando hacia mÃ, que imagen tan bonita… solo estamos él y yo en el mar, y sigue nadando, y sigue, no se gira para nada, siempre de frente, como si estuviese orgulloso el cabron… jajajaja después de unos 50 segundos, el dentón está enfrente de mÃ, pienso que no tengo que precipitar el tiro, se le ve muy tranquilo, asà que lo dejo desfilar hasta que está a un metro de la varilla, entonces empieza a girarse y me enseña un ojo, aprieto el gatillo, se rompe el silencio, la tranquilidad, la paz, se rompe todo, menos mal que no se rompe la espoleta de la varilla jajajjaja . Veo como el dentón se queda en el hilo del fusil, del primer tirón se lleva unos 5 metros de hilo, pero se queda atascado en el carrete, y como voy sobrado de apnea, decido ir a por él, lo cojo de la cola, el tiro es muy bueno, imposible que se rompa, asà que subo tranquilo. Ya está, ya, es mÃo, siento como si algo que me estaba ahogando se me quitara de encima, esa espina clavada… casi pierdo la vida por uno de estos, y ahora lo he pillado en 1 minuto y 3 segundos de apnea, a 6 metros, sobradÃsimo. Lo abrazo (para que no se escapara, a ver si os vais a creer que soy zoofilico o algo de eso raro) me están cayendo lagrimas dentro de los lentes, es como si me diera cuenta ahora de lo que me paso… de lo que arriesgue por un pescado, y de lo que estuve a punto de perder por un pescado… estoy como 2 o 3 minutos asÃ, mirándolo, como si el tuviera la culpa jajajajaajjajaja. Los cabrones, que parece que entran pero no…
Nada, despierto, estamos en una competición, se me dibuja una sonrisa en la cara, y creo que pesque con esa cara de agilipollado todo lo que quedaba de competición jajajaaja.
Cojo mi cuchillo, miro el animal, lila, con esos colmillos… ¿cómo se puede ser tan bonito? Que colores… le pongo el cuchillo en las agallas, dos coletazos, y al pasapeces.
Sigo nadando y un rato más tarde llega mi compañero con la barca, lleva dos lisas. Cuando ve el dentón me dice: cabron… volverás a hacer pieza mayor jajajajaja. Subo el pescado a la barca para no tener que arrastrarlo, y se va a fondear la barca más adelante para tirarse, y yo sigo pescando.
Se nota la escasez de pescado, y que ya no estaba pescando solo… encuentro dos enrocadas de sargos difÃciles que solo consigo pillar uno en cada una… y en una zona de algas y roca consigo sacar una grivia y un massot, pero entre pescado y pescado tengo que pelearme con mi sinusitis, hasta al punto de no poder compensar una oreja, y tener que esperar a que se ponga bien sin poder bajar ni un metro… Pero no pasa nada, llevo un fin de semana de disfrute, y tengo la sonrisa dibujada en la cara todo el tiempo.
Llega el final de la prueba y nos dirigimos al punto de encuentro. Al terminar el recuento vamos al puerto, volvemos a pasar por el sitio que me dio el sincope, esta vez lo miro con una sonrisa, con positividad, y con alegrÃa de haber aprendido la lección, aunque sea por las malas.
Entregamos el pescado y se ve que lo que ha dominado ha sido la escasez de pescado.
Solo queda sacar la barca, comer, y el pesaje.
Después de las tÃpicas anécdotas en la comida, empieza el pesaje, quitando las excepciones, la cosa esta muy igualada, y se ha pillado muy poco pescado. En la última nevera sale mi pescada, y después de la foto, el dentón da 3,596 kilos, no es una pieza espectacular, pero por lo que significaba para mÃ, se queda en una de las mejores de mi vida jajajaja. Ah, y en la pieza mayor del campeonato jajajaja.
Tras 2 o tres pesadas más, se hace la entrega de trofeos, y la cosa finalizo con el 11ª posición, y la pieza mayor del campeonato, recibiendo el trofeo del más grande, Pep Amengual.
De este fin de semana de disfrute me llevo 1 minuto de pelÃcula, viendo desfilar a ese dentón hasta darle un besito a la varilla.
Una lección: si entran, entran, sino parriba…
Y la pieza mayor en ese bonito campeonato.
Espero que os haya gustado la crónica, y aquà tenéis unas cuantas fotos.
Un saludo, y buen azul a todos, espero poder poner una crónica de algún pescadito guapo lo antes posible!!!
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En el pesaje, con el dentón ya tieso... |
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Antes de recibir el trofeo de Pep Amengual |
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